EN LOS VERBOS; TU VOZ
Lloro con las orejas, con los dientes, de espaldas, tapada de papeles
lloro sin llorar, sin pañuelos, sin posibles sonrisas
agotada de tanto llanto no nacido
de tanta congoja guardada a más no poder.
Correr con paraguas, con mochilas, con las piernas atadas
y la nariz sangrando
continuar corriendo mientras el sollozo nos quita la respiración
dejando las ropas por el camino, tirando los brazos
desparramando los dedos
envuelta en la taquicardia del corazón que se sale
seguir siempre, seguir a cualquier precio.
Tomar mate sin bombilla, clases de danza, flores marchitas
con las manos temblorosas, con los pies cruzados, fuera de espacio
tomar para nada, tomar y tirar, arrojar, maldecir
las palabras y las fuerzas que a veces se padecen.
Extraño con los ojos hinchados, las uñas desparejas, la bufanda azul y el sombrero sin guantes
desequilibrada porque aun más extraño cuando trato de olvidar
cuánto soy capaz de extrañar
extrañar tapados de cartas, fotos amarillas, flores disecadas
extrañar en verdad, con el amor atrapado entre los dientes
las perchas vacías, las monedas contadas, el reloj detenido.
Arrancar de cuajo, de raíz, o apenas levemente, un tirón sutil
con tenazas, con la fuerza, con la piel, violentamente
arrancar hasta el martirio, en muñones, en tiras, en harapos
despedazados por las calles, desperdigados por la pampa
me arranco del deseo, de los viajes inaccesibles de la memoria
arrancada sin cáliz, despojada de hojas, desarraigada de la tierra.
Crear es creer y querer y desear y separarnos hasta el desgajamiento
te creo hasta la más inverosímil de las patrañas
hasta el último trazo de tu cuerpo
hasta el terrible silencio de algún diálogo
crear con los pies hacia arriba, con el amor entre las piernas
con adobe, yeso, engrudo, con espátula, sin pautas, sin premisas
nos creamos mutuamente y entonces yo te doy un brazo
y vos un tobillo
compulsivos creamos historias para justificarnos y justificarlos.
Dar como si no hubiera nada que perder
demos que también nos dan aunque a veces lo ignoran
pero dar porque no se da más... quizás de tanto dar sin recibir
tal vez de no dar nada y esperar demasiado
me doy a vos por completo, en entero, sin fragmentos
te doy naturalmente, en la fiesta del acto de dar.
Hablar hasta por los codos, sin los labios, con los ojos
después del amor, con la verdad, sin vacilación, sin premeditar
hablemos una vez más con el viento y las aves
si es que comprendemos
hemos hablado tanto pero palabras necesarias
hablan convencidos de tanto bien, de tanta mentira, sucios,
con la lengua llagada por el fuego de la agresión
nos hablan de la lógica y la razón,
de los derechos y las obligaciones
hasta que los oídos escapan como niños horrorizados
de nuestras cabezas.
Ahogar las narices en aguas pantanosas, el cuerpo entero
con los pulmones estallando
los ojos salientes, los nervios crispados,
las manos aferrando, las venas infladas
me ahogo egoísta en un líquido amniótico, dentro
de mis propias fauces
cubierta de mi misma bilis, atragantada con la sangre,
con el vómito, con la injusticia
te ahogo y sin culpa porque es siempre con amor
te hundo en los fondos, te sumerjo hasta que la piel es azul
ahogados probamos las exquisiteces del daño,
el deleite de la asfixia
nos ahogan en falsas aguas, en naufragios seguros,
en botes pinchados, sin salvavidas, sin aire, sin sogas,
sin más palabras que el adiós.
Hablábamos con tan poco conocimiento de los ahogados
ahora nos ahogamos insuficientes entre el cardumen
que nos come enloquecido los pies y el terrible descensode los pasos perdidos.
Este libro fue editado en forma independiente en el año 2003, en Ituzaingó, Provincia de Buenos Aires.